Desde el 1 de octubre de 2024, una huelga en los principales puertos de la Costa Este y del Golfo de los EE. UU. amenaza con causar grandes interrupciones en las cadenas de suministro globales. Esta es la primera huelga de este tipo desde 1977, y afecta aproximadamente al 50% del transporte marítimo del país.
Causas del conflicto:
Los 45.000 trabajadores portuarios, organizados por la International Longshoremen's Association (ILA), exigen un aumento salarial y mejores condiciones laborales, especialmente en relación con la automatización en los puertos, que consideran una amenaza para sus empleos.
Impacto económico:
Los expertos estiman que esta huelga podría costar entre 3,8 y 5 millones de dólares diarios a la economía de EE. UU., con efectos inmediatos en el transporte de productos perecederos y vehículos, que dependen de los puertos afectados. Aunque los primeros días generaron retrasos manejables, si la huelga se prolonga, podría generar aumentos en los precios de los bienes importados, especialmente en alimentos y productos de consumo rápido.
Consecuencias a largo plazo:
El número de barcos varados en puertos clave, como Savannah, Charleston y Nueva York, ha aumentado drásticamente. Si la huelga continúa, se esperan problemas logísticos importantes y mayores costes para las empresas que dependen del comercio marítimo. Para minimizar los efectos, muchas empresas están recurriendo al transporte aéreo, aunque este conlleva mayores costes.
Conclusión:
A medida que la huelga se prolonga, los riesgos para la economía estadounidense y global aumentan. La capacidad de las empresas para adaptarse mediante el uso de soluciones como el transporte aéreo será crucial para evitar pérdidas mayores.
Fuente: Business Insider
